Namibia, la joya del desierto
Adéntrate en los mayores desiertos de África y descubre una forma de vivir completamente alejado de lo que conoces. Dunas, lagos y safaris que nunca se marcharán de tus recuerdos, atrevete a experimentar esta gran aventura.
CUÁNDO IR
La mejor época para ir es sin duda Mayo, que es el mes más húmedo. Esto puede parecer una contradicción, pero recuerda que estás en una zona desértica, así que es muy improbable que te llueva, pero encontrarás la vegetación florecida y un clima fresco.
QUÉ VER
Los dos parques nacionales que no puedes perderte son el Etosha, uno de los más grandes del mundo, y el Namib-Naukluft, donde encontrarás el que es considerado como el desierto más antiguo del mundo.
Dunas anaranjadas, lagos y la sierra, todo un arcoíris de contrastes para que paséis un viaje inolvidable. Ten en cuenta que los parques están separados entre sí a la hora de planear el viaje. Además, encontrarás zonas de camping, ¿te atreves a acampar en los parques más majestuosos del continente africano?
Tampoco puedes dejar pasar la oportunidad de ir a Kolmanskop, una ciudad fantasma construida en 1908. En esta zona era muy fácil encontrar diamantes, pero tras la primera guerra mundial se encontraron minas de mayor calibre y la ciudad fue abandonada.
CULTURA
En Namibia existe una gran diversidad de grupos étnicos, como los Himba o los Owambo. La cultura de la zona bebe de estos grupos y de aquellas tradiciones que trajeron los colonizadores alemanes y afrikáner, aunque el único grupo étnico que conserva el estilo de vida más tradicional son los Himba.
Las artes musicales, de danza y arquitectónicas están altamente desarrolladas. Desde la única utilización de la voz para crear sonidos de animales, hasta los ritmos con tambores, se unen para crear una melodía autóctona y diferenciada. Cada etnia y zona tiene sus propios recursos musicales y de baile, así que allá a donde vayas seguro que te sorprenderás.
QUÉ COMER
Aunque el braaivleis (un tipo de cocina a la barbacoa) es una de las comidas típicas de Namibia, no puedes dejar de probar los platos tradicionales de las diferentes etnias como el mileie (un guiso de harina de maíz), o algún plato preparado con cucurbita moschata, una especie de calabaza originaria de América, pero que tiene una larga tradición en la zona.
Nuestra recomendación especial es un poco turística esta vez, pero es que no puedes quedarte sin ir a la pastelería Solitaire. Se encuentra en medio del desierto y tiene también gasolinera. Su dueño, enterrado en la misma finca, hizo famosa su tarta de manzana.