Supermercados sin plástico: Yes, Future

8.300 millones de toneladas es la cifra de plástico producido en el mundo. Esta cifra fue calculada por Roland Geyer en su artículo “Production, use, and fate of all plastics ever made” de 2017. Es, sin lugar a duda, una cifra impresionante.

Si a esto sumamos la dificultad que tenemos actualmente para reciclar este material, nos deja con unos residuos de larga duración y perjudiciales para el medio ambiente descomunal. Es por ello que han surgido movimientos como el Zero Waste, que abogan por la reducción de residuos de todo tipo al mínimo posible.

En Madrid y en Barcelona ya existen supermercados que no producen residuos plásticos, así que me he acercado al supermercado “Yes Future” en la calle Viladomat 66 en Barcelona, para preguntarles sobre esta innovadora forma de comercio ecológico.

Alejandro y Olga son socios de este impresionante establecimiento, que resplandece en medio de la ciudad. Hemos hablado con Alejandro, y nos ha encantado la visita, entre otras cosas porque casi todo el producto es de proximidad y kilómetro 0, ¡atento a la entrevista!

Cuéntanos un poco sobre este proyecto y sobre la situación en España. ¿De dónde os viene la idea de abrir Yes Future, un supermercado libre de envases?

Alejandro: Nosotros dos vivíamos juntos, éramos compañeros de piso. La idea surgió tras darnos cuenta de la cantidad de residuos que generábamos tras nuestra compra semanal, especialmente residuos plásticos como los envases, que se tiraban prácticamente nuevos al contenedor del reciclaje y pensamos, ¿por qué no podríamos volver a rellenarlos? Además consumiamos producto ecológico y nos costaba entender como un producto que es respetuoso con el medio ambiente durante su producción, no lo era en el momento de envasarlo en un plástico que se desecharía la llegar a casa. Nos dimos cuenta que hacer una compra 100% a granel no era fácil, ya que si queríamos comprar bebida teníamos que ir a un sitio específico, si queríamos comparar producto de limpieza teníamos que ir a otro, etc… Así que dijimos, por qué no abrir un mismo espacio, donde la gente pueda hacer un compra completa a granel, de producto 100% ecológico y de una manera sostenible, donde fomentar que el cliente re-utilice sus propios envases, en lugar de comprar nuevos. Los envases en tienda se pesan previo a ser rellenados para retirar la tara del envase y así pagar solo por el contenido, de ese modo se crean menos residuos para el medio ambiente en cada una de las compras de un consumidor. Así que nos pusimos a trabajar en ello y, tras año y medio de proyecto y ejecución, Yes Future abrió puertas como el primer supermercado sin envases.

¿Encontraste una gran aceptación desde el principio o fue un comienzo duro?

 A: La verdad que fue una experiencia bastante buena desde el inicio, porque a pesar de que en países como Australia, Alemania o EE. UU. ya existen iniciativas de este tipo desde hace tiempo y no sabíamos si el consumidor de aquí estaba preparado para un cambio de hábitos de consumo como este, descubrimos que sí y que de hecho, lo estaban esperando. Tenemos clientes de todas las edades, quizá las primeras veces que vienen no traen los envases, pero tras esa primera visita a posterior ya vienen con sus bolsas o envases desde casa para rellenarlos de nuevo. Así que, por ahora estamos contentos de la recepción que está teniendo.

¿Tenéis pensada alguna línea de ampliación de negocio? ¿Por ejemplo reparto a domicilio en bici o motos eléctricas?

A: Sí, ¡en ello estamos! Abrimos hace solo un año y dos meses y todavía estamos trabajando para asentar la tienda en las primeras fases. El proyecto es mucho más grande pero vamos paso a paso, al fin y al cabo somos solo nosotros dos y hasta finales de verano ha estado Olga sola en la tienda, pues yo mantenía mi antiguo trabajo, pero están en proyección varias cositas para ir ampliando y siempre en línea con nuestros valores, por lo que si hacemos reparto a domicilio seguro que será en transporte sostenible. Por el momento cada semana intentamos tener producto nuevo, bien sea de alimentación o de utensilios zero waste que vamos probando.

¿Cuáles son las preguntas más frecuentes de clientes con respecto al negocio? ¿Qué les cuesta más entender? ¿Qué es lo que más les gusta?

A: ¿Cómo funciona? Esta es la pregunta que más nos hacen. Muchos clientes al entrar en tienda, ven que todo es a granel, pero quieren saber si es autoservicio, si pueden traer envases de casa o si de lo contrario no los traen, preguntan si pueden comprar igualmente. No hay nada en particular que cueste de entender, cuando el cliente ve la tienda y habla con nosotros, la lógica por volver a consumir de un manera más sostenible les es evidente, y por tanto comparten que hay que comenzar a cambiar nuestros hábitos de consumo, especialmente en la comida. Nuestra pared con grifos para rellenar los productos de limpieza para el hogar y la sección de alternativas naturales a utensilios de plástico, como los cepillos de dientes de bambú, los estropajos de luffa, etc… es la parte de la tienda que más gusta en general, quien ya conoce de estas alternativas sólo las encuentra por internet, así que están encantados de poder encontrar esa sección en nuestra tienda pues de ese modo pueden tocarlos y preguntarnos cómo usarlos, es más personal.

La eliminación de plástico de todos los productos es sin duda todo un reto, ¿tienes problemas con los proveedores?

A: No tenemos grandes problemas pero si nos requiere un esfuerzo en encontrar con quién trabajar ya que, el formato en cómo nos envían los productos es importante para nosotros. Al fin y al cabo, creemos que nuestra filosofía debe ser coherente tanto de cara al consumidor como a nivel interno de la empresa. Con algunos proveedores hemos conseguido que reduzcan al máximo el uso de plásticos en sus envíos, algo de lo que estamos muy agradecidos, con otros estamos todavía en ello. Es algo que tenemos muy presente, no solo con los plásticos si no también con envoltorios que consideramos innecesarios, por ejemplo inicialmente los cepillos de bambú nos llegaban individualmente envueltos y en cajas de 10 en 10, así que solicitamos eliminar estas cajas, aunque fueran de cartón y biodegradables para que nos llegaran los cepillos individualmente envueltos en una única caja. Al final entienden que siempre se puede reducir residuos un poco más.

¿Qué es el movimiento Zero Waste?

A: Es intentar reducir el máximo posible los residuos y la basura que generamos en nuestro día a día. No es algo que se pueda conseguir al 100% de un día para otro, es un proceso que requiere tiempo y un pequeño cambio de hábitos, pero yo siempre se lo digo a los clientes, si al final uno consigue reducir su basura en un 50%, otro en un 30% o otro en un 70% , ya se está haciendo mucho para el medio ambiente.

¿Cuáles son las alternativas para bebidas y líquidos?

 A: ¡Comprarlos a granel y rellenar las botellas que tengas en casa! Nosotros por el momento tenemos surtidores de vino, cerveza, (que es artesana, ecológica y sin gluten), y kombucha. El cliente puede traer su botella de casa o puede comprar las que tenemos en tienda y re-utilizarlas posteriormente.

Con respecto a la limpieza en casa, geles, detergentes y lavavajillas, ¿cómo se puede solventar, teniendo en cuenta que algunos son muy fuertes?

A: Para la limpieza del hogar nosotros hemos apostado por productos hechos en Barcelona y biodegradables, son productos elaborados con un % de tensioactivos bajos que son respetuosos con el medio ambiente y que además funcionan de maravilla. Los ofrecemos a granel, como el resto de productos de la tienda, y el cliente puede llevarse la cantidad que necesite, ni más ni menos.

Actualmente en España nos encontramos con una situación algo precaria con respecto a la economía ¿dirías que es más caro comprar de este modo, o que conlleva un extra de tiempo a la hora de comprar?

A: En general comprar a granel siempre debe ser más barato, porque se ahorra el coste de envasado y además puedes comprar solo la cantidad que necesitas y ajustar así tu gasto, mientras que con los productos envasados, además de añadir costes de envasado al precio final, debes llevarte la cantidad marcada en el paquete, lo que conlleva que si no la consumes, pueda ocasionar un desperdicio alimentario que se traduce en malgasto económico. Es importante destacar, que a la hora de comparar precios se deben conocer valores del producto como su calidad, el tipo de cultivo o la procedencia del producto, pues no puede costar lo mismo un arroz redondo ecológico importado de Asia, que uno cultivado aquí, en el Delta del Ebro. Es cierto que la compra a granel sí conlleva una inversión mayor de tiempo, pero consideramos que es algo positivo, pues te permite organizar tu compra previamente y por lo tanto reducir caer en compras compulsivas atraídas por un marketing del envasado de los productos.

Saliendo un poco de la comida o utensilios, ¿qué le recomendarías a las mamis y papis sobre pañales, toallitas o enseres para bebés que cubren las estanterías de plástico?

A: Hay alternativas más sostenibles, como pañales biodegradables o pañales de tela lavables, como se hacía antes. También pueden encontrar toallitas para la limpieza del bebé de tela, que además de ser más respetuosa con el medio ambiente, lo son con la piel del bebé ya que no llevan perfumes ni lejías para blanquear. Nosotros todavía no tenemos la sección especial para bebés en tienda, pero es posible que vayamos introduciendo opciones poco a poco, por el momento en esa línea, tenemos ya los discos desmaquillantes re-utilizables de algodón orgánico.

Mientras estuve allí vinieron a traerles el pan, venía en un saco típico de panadería, de donde lo sacó y este se lo devolvió a la proveedora, que podrá volver a utilizarlo, ¡fantástico! Me estuvo enseñando productos curiosos, como las pajitas de acero inoxidable o bambú, con su cepillo para limpiarlas o los cepillos de bambú completamente biodegradables. Tienen también unas tarrinas que parecen de plástico, pero que son de fécula de maíz, por lo que es biodegradable, y se puede reutilizar.

La verdad es que darme un paseo por Yes, Future, el pequeño supermercado de Sant Antoni sin plástico, ha sido todo un descubrimiento y una aventura. Sólo puedo recomendaros ir y probar algunos de sus maravillosos productos, como los geles y champús secos, que están hechos a mano por una chica de Tarragona.

¿Te apuntas al movimiento Zero Waste?